La Nogalera
Dos de las principales urbanizaciones de Torremolinos, La Nogalera y Playamar, fueron construidas ambas en 1963 por el arquitecto Antonio Lamela Martínez, a quien ya hemos hecho referencia en el apartado de arquitectura.
La Nogalera fue un auténtico hito arquitectónico. El promotor fue don José Osinalde Peñagaricano. El proyecto se desarrolló sobre un solar de 23.500 m2. La zona comercial se sitúa al nivel de la calle mientras que los jardines y las entradas principales de los edificios se ubican en alto. Los apartamentos se reparten en seis edificios y la urbanización cuenta con varias piscinas, minigolf, zonas de esparcimiento, garajes. Actualmente existen en La Nogalera 408 viviendas. El número total de fincas, entre locales y apartamentos, es de 770. Se inauguró oficialmente en 1966, con presencia del ministro Manuel Fraga Iribarne.
Los materiales fueron cuidadosamente seleccionados y el empleo de la madera ennobleció tanto los locales comerciales (por desgracia ha sido suprimida en casi todos ellos) como los techos de las galerías comerciales y de las terrazas de las viviendas. Son magníficos también los luminosos que se situaron en las dos torres más altas. Los apartamentos fueron arreglados por el decorador Sáez.
Para lograr la transición con la arquitectura tradicional de de Torremolinos, se realizó el llamado Pueblo andaluz de La Nogalera: una serie de locales con fachadas típicas que fueron muy codiciados para la instalación de restaurantes y bares y sirvieron de fondo para no pocas postales.
La Nogalera fue sinónimo de lujo en la época dorada de Torremolinos. Y recibió la Placa de plata al Mérito Turístico otorgada por el Ministerio de Información y Turismo. Sus locales comerciales ostentaron nombres que ya pertenecen a la historia local: el King´s club, los restaurantes Estocolmo, El caballo vasco, El Igueldo y Cosa Nostra, propiedad del actor italino Massimo Serato;, la creperie La vaca sentada, el bar Elle et lui, la Librería Internacional, las confiterías Reine Astrid y Bagatelle; la tienda de modas Ekseption. Dos literatos tuvieron sendas tiendas de antigüedades en los locales de La Nogalera, el poeta Pablo García Baena fue propietario de El Baúl en el local nº 409; y el novelista húngaro András László tuvo Capricornio, en el local nº 14, Otros antiguos negocios aún continúan en funcionamiento como los restaurantes Los Pampas, El gato viudo, y el pub Pourquoi pas?. Y las galerías interiores albergan hoy numerosos pubs y discotecas, muchos de ambiente gay.
Entre los residentes de La Nogalera estuvieron el escritor Edgar Neville, que adquirió uno de sus apartamentos, al igual que el ministro León Herrera, y el «rey del acero» José María Aristrain Noain. También residió en La Nogalera el mítico falsificador de obras de arte Elmyr de Ory. Y en los veranos el escritor y letrista Rafael de León, el compositor Juan Solano, o la famosa presentadora de los años 60 Marisol González